Crece el 20% la ocupación en pisos turísticos en Rías Baixas
La zona turística del litoral sur es hegemónica en Galicia frente a Rías Altas y la Mariña
En la Colina de Castrelos hay una guerra vecinal por un apartamento turístico. En la Colina de Castrelos hay una guerra vecinal por un apartamento turístico.
ANA FUENTES / Atlántico Diario
Los apartamentos turísticos sumaron en torno a 147.000 pernoctaciones en la zona turística Rías Baixas durante el pasado verano, según las cifras que maneja el Instituto Nacional de estadística en su encuesta de ocupación, que ahora también se fija en dicha modalidad de alojamiento, que no deja de crecer. Tanto que en apenas un año se ha incrementado un 20 por ciento el número de usuarios de esta modalidad (fueron algo menos de 123.000 en 2018) en las Rías Baixas, el entorno turístico que va desde Sanxenxo hasta Baiona, que cada año suma el mayor número de visitantes durante el verano. En 20019 también ha sido así en alojamiento en pisos registrados. En Vigo, en concreto, hay 310 anotados y 4.000 en toda la provincia, la mitad de todos los existentes en Galicia, unas 8.500 ahora. De las exactamente 146.458 pernoctaciones, la mayoría son españoles y apenas un 15 por ciento extranjeros, 17.013, según las cifras que maneja el instituto oficial.
Según el INE, las otras dos zonas turísticas gallegas del litoral, la Mariña lucense y las Rías Altas, están muy lejos de las cifras de Rías Baixas también en este aspecto, como ya ocurre con los hoteles convencionales. La Mariña anotó unos 43.000 pernoctaciones y las Rías Altas todavía menos, unas 23.000, muy lejos de los números de la costa del sur de Galicia.
Según los últimos datos existentes en el reparto por municipios, en las Rías Baixas manda Sanxenxo con 1.629, casi el 20% del total de Galicia. En Vigo ciudad hay ya 310 y entre los municipios con más pisos turísticos están O Grove con 282, Cangas con 231, Bueu con 161 o Baiona con 135. El incremento de plazas en Vigo está provocando incluso algunos conflictos, como la denuncia interpuesta por la comunidad de vecinos de la residencia Colina de Castrelos contra uno de los propietarios que ha convertido su vivienda en un piso para la llegada de turismo. Para el resto del vecindario se ha convertido en un auténtico dolor por la llegada masiva de todo tipo de personas.
Otra consecuencia está en que el crecimiento acercando las cifras de plazas en viviendas de uso turístico a las de los hoteles. En la provincia las viviendas de uso turístico superan ya las 20.000 plazas frente a las casi 26.000 de hoteles.