La rehabilitación del Casco Vello de Vigo se bloquea
ALEJANDRO MARTÍNEZ / LA VOZ DE GALICIA
La falta de presupuesto en el consorcio por el rechazo del Concello impide poner en valor 14 edificios.
La falta de entendimiento entre la Xunta y el Concello mantiene bloqueada la recuperación de edificios en la zona histórica de Vigo. La negativa municipal a aprobar el presupuesto del Consorcio Casco Vello supone un freno a su misión rehabilitadora. Este organismo no puede ejecutar su plan de actuaciones para el período de 2022 y 2023 por un importe de tres millones de euros. Los concejales de Vigo votaron en contra del documento en una sesión celebrada en septiembre del año pasado y las cuentas se encuentran prorrogadas desde el ejercicio de 2021. En estos momentos, hay obras para la puesta en valor de cinco edificaciones que se encuentran paralizadas.
Son los propios técnicos los que no han podido informar a favor de estos proyectos al no existir partidas habilitadas. El propio interventor desaconsejó recientemente la reforma de uno de los inmuebles situado en el número 9 de la Subida á Costa. El funcionario no veía viable encargar la redacción de proyectos si luego no pueden ser licitados o adjudicados. Debido a la inflación, los precios de las materias primas varían constantemente, por lo que el presupuesto previsto en los proyectos carece de valor real, a efectos de una licitación. El comité ejecutivo del Consorcio tuvo que retirar la iniciativa del orden del día. De la misma forma, también están paralizados los trabajos de rehabilitación en los edificios de San Sebastián 20, Berbés 39, Hortas 24 y Elduayen 31.
También están bloqueadas actuaciones en nueve edificaciones y catorce viviendas de promoción pública con una inversión de 1,5 millones. La finalidad principal de los edificios rehabilitados es el uso como vivienda social, preferentemente en alquiler, y como locales comerciales. Los más perjudicados por esta falta de acuerdo entre ambas administraciones son los beneficiarios por la recuperación de los edificios, que tendrán que esperar más tiempo para poder acceder a una vivienda en condiciones ventajosas.
A pesar de que el Concello solo representa un 10 por ciento del Consorcio y el restante le corresponde a la Xunta, es necesario el visto bueno de la administración local para poder ejecutar las partidas previstas.
Por ese motivo, la delegada de la Xunta, Marta Fernández Tapias, critica que el Concello está bloqueando los proyectos de rehabilitación, que están parados en distintas fases de ejecución. Reprocha el empeño del alcalde de «torpedear» la labor de un organismo que suma ya 83 edificaciones y 117 viviendas rehabilitadas.
Por su parte, la concejala de Urbanismo, María José Caride, acusa a Marta Fernández-Tapias de no querer consensuar el presupuesto del consorcio. Xunta y Concello han defendido diferentes criterios en torno al Casco Vello. La administración local se opone a la cesión gratuita a la Xunta de un espacio para la apertura del Centro Galego de Arte Contemporáneo y demanda la cesión de locales.