La Xunta fija el final del ‘PGOM’ provisional de Vigo en septiembre El alcalde de Vigo ve una actitud dañina para Vigo.
La Xunta fija el final del ‘PGOM’ provision
Atlántico / Santi Alonso
Abel Caballero acusa al gobierno gallego de incumplir plazos en la tramitación del PGOM y el Concello solicita de nuevo una reunión con Patrimonio
La tramitación de Plan General de Ordenación Urbana (PGOM) de Vigo sigue pausado y provocando intercambio de pareceres totalmente opuestos entre los responsables de la Xunta de Galicia, que debe aprobarlo, y del Concello de Vigo, que lo ha elaborado. Ayer, tanto el alcalde de la ciudad, Abel Caballero, como la vicepresidente del gobierno gallego y conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, Ángeles Vázquez, volvieron a cruzar acusaciones de incumplimiento. Por el momento, sigue en vigor el Instrumento de Ordenación Provisional (IOP) que ha permitido cierta actividad desde que en 2015 el anterior plan se vino abajo por sentencia judicial. Su caducidad es inminente y, ante las dudas, la conselleira fijó ayer su tope: el mes de septiembre.
Caballero, por su parte, fue contundente: “El PGOM no está aprobado porque la Xunta está retrasando sus informes, los da en negativo y lo alarga meses y meses. Ya perdimos un año”. Y no dudó en señalar como motivación única “la política, ligado a las elecciones municipales, primero, y ahoga generales”. El regidor auguró que no habrá aprobación, por lo tanto, hasta después del 23 de julio. Porque advirtió de que la aprobación definitiva del gobierno gallego “pemitiría que en un plazo brevísimo de tiempo hagamos la aprobación”.
En cuestión de plazos, Ángeles Vázquez fijó ese mes de septiembre de decaimiento del IOP como tope. “Deberían agilizarlo para tenerlo antes del mes de septiembre. Espero que la Consellería de Cultura pueda tener el informe a lo largo de esta semana”, apuntó la vicepresidenta gallega. Porque en lo que sí coinciden las dos partes es que, ahora mismo, la aprobación definitiva está pendiente de dos informes: uno de Patrimonio y otro de la Axencia Xeral de Infraestructuras. A partir de ahí, el desacuerdo es total.
El alcalde apuntó ayer que el de Infraestructuras fue remitido “en abril” y que, por lo tanto, se habrían cumplido -el pasado martes- tres meses “sin respuesta”. Llegado a este punto, Caballero considera que “este informe está aprobado. Se da por positivo”. En cuanto a Patrimonio, señala que la contestación al último requerimiento del organismo autonómico data de “mediados de junio” y que siguen sin respuesta a una reunión solicitada con la directora xeral. La determinación del gobierno municipal, en este caso, ha sido reiterar ayer mismo tal petición. Además, reseñó que a Vigo se le estarían pidiendo más requisitos que a ninguna otra ciudad gallega.
Diferente visión
La visión de Ángeles Vázquez es opuesta. Por partes, sobre el informe pendiente de Patrimonio, argumenta que se recibió la última información remitida por el Concello “el pasado jueves. No puedo entender que el alcalde diga que es la Xunta la que está poniento trabas”. También reconoce que está pendiente un informe de Infraestructuras pero considera que se debe a que “fue desfavorable en dos ocasiones por algo muy sencillo: hay que cumplir la ley. Este informe no tenía el estudio de movilidad ni de tráfico de las zonas que se pretenden desarrollar, que es lo mínimo que se puede pedir”.
Abel Caballero tiene muy clara la animadversión de la Xunta. “Lo están retrasando y eso significa dañar a la ciudad, a las empresas y a la gente”, resumió. Y por eso, remata: “Le exigimos la aprobación inmediata de este informe”.
Para que decaiga el IOP y el urbanismo se paralice faltan dos meses.